En la
última década, la emergencia del cannabis como posibilidad terapéutica ha sido
un fenómeno visible en nuestro país. El redescubrimiento de la planta y de su
uso para tratar diversas dolencias y afecciones condujo a una creciente demanda
de información clara y certera. A su vez, implicó la necesidad de delinear
políticas públicas en materia de salud.
Como profesionales de la salud, se torna complejo trabajar su potencial
medicinal en un escenario de resistencias, incertidumbre legal y difícil
acceso, aun cuando la evidencia científica y un objetivo terapéutico claro
hacen de su uso una opción segura y eficaz en la práctica clínica.
Nuestro país cuenta desde el año 2017 con la Ley Nacional 27.350, “Ley de
Investigación médica y científica del uso medicinal de la planta de cannabis y
sus derivados”. Su reciente re-reglamentación, en noviembre de 2020, abre
distintos caminos que favorecen el acceso a una posible terapéutica.
Es en este marco que el curso se propone generar un espacio donde recuperar,
construir y transmitir saberes, con una perspectiva interdisciplinaria, que
favorezcan los procesos de salud-enfermedad-atención donde participe la planta
de Cannabis sativa L.